Jerusalén es una ciudad rica en historia, cultura y espiritualidad. Hay muchos lugares que no se deben perder al visitar esta ciudad, entre ellos:El Muro Occidental (Muro de los Lamentos): es uno de los lugares más sagrados del judaísmo, donde los judíos acuden a rezar y dejar sus plegarias.La Ciudad Vieja de Jerusalén: es un laberinto de calles estrechas llenas de historia y cultura, que se encuentra dentro de las murallas de la ciudad. La Ciudad Vieja está dividida en cuatro barrios: judío, cristiano, musulmán y armenio, cada uno con su propia historia y arquitectura.El Santo Sepulcro: es uno de los lugares más sagrados del cristianismo, donde se cree que Jesús fue crucificado, enterrado y resucitado. La iglesia es impresionante y hay muchas capillas dentro del edificio.La Torre de David: es una fortaleza histórica ubicada en la Ciudad Vieja, que alberga el Museo de la Historia de Jerusalén. Desde la cima de la torre se puede disfrutar de una vista panorámica impresionante de la ciudad.El Monte de los Olivos: es un lugar sagrado tanto para judíos como para cristianos, que ofrece vistas impresionantes de la ciudad. En el monte se encuentra la Capilla de la Ascensión, donde se cree que Jesús ascendió al cielo.El Yad Vashem: es un museo y monumento en memoria del Holocausto, ubicado en las afueras de Jerusalén. El museo es conmovedor y una visita obligada para aquellos que desean aprender más sobre este triste capítulo de la historia.El mercado de Mahane Yehuda: es un vibrante mercado al aire libre donde se pueden encontrar productos frescos y locales, así como bares y restaurantes populares. Es un gran lugar para experimentar la cultura y la comida de Jerusalén.Estos son solo algunos de los lugares que no se deben perder en Jerusalén. La ciudad tiene mucho que ofrecer, y explorarla puede llevar varios días o incluso semanas.