MOCHILA PARA DOS
Bogotá es la capital y la ciudad más grande de Colombia; a pesar de que por muchos se ha considerado solo ciudad, va más allá de ser solo metrópolis, pues está situada en un altiplano a más de 2.600 MSN y está rodeada de un mar sin fin de bosques y verdes montañas. Es el punto de encuentro de Colombia; acá las culturas de todas las regiones tienen cabida. Es por esto que se convierte en una ciudad multicultural y un lugar infinito por conocer. Aunque la gran mayoría de personas llega a la parte urbana, muy pocos pueden gozar del paisaje que se ve cuando se eleva la mirada a la cordillera de los Andes. Por esta razón hemos realizado un viaje desde el centro de la localidad de Tunjuelito, pasando por Usme y llegando a uno de sus puntos ecológicos más altos como lo es el Sumapaz. Realizamos un diario de campo y a partir de la información recopilada, seleccionándola y organizándola detalladamente, nos planteamos identificar y describir las diferencias en la zona urbana, la periurbana y la rural a través de una perspectiva ambiental, cultural y posibles actividades económicas.Viajamos por 3 zonas: empezamos en el sector urbano, primero en el Portal Tunal, donde encontramos relaciones culturales y un ejemplo claro de lo que hoy llamamos sobrepoblación. Posteriormente hicimos una parada en el barrio Yomasa, que se ha considerado un lugar de importancia en la zona por su reconocida escultura de la Princesa Usminia, y en donde se nota el fuerte impacto del ser humano en el cuerpo hídrico de la quebrada Yomasa, además de esto la relación sociedad-naturaleza.Siguiendo el recorrido, estuvimos en la zona periurbana que se considera la frontera entre lo urbano y lo rural. Usme pueblo, conocido principalmente por su emblemática iglesia y su parque principal, cuenta con innumerables relatos históricos y culturales en los que se evidencia la esencia de pueblo, a pesar de que ya no lo es, puesto que ha perdido rasgos culturales que lo caracterizaban. Más arriba estuvimos en la vereda la Requilina, territorio rural que cuenta con un papel femenino muy influyente dentro de la zona, y asimismo se ve el Agroturismo como una forma de resistencia frente a las problemáticas por la expansión urbana.Más tarde entonces llegamos al ecosistema rural, primero en El embalse La Regadera, lugar lleno de vegetación y fuera de la periferia urbana, este espacio cuenta con invasiones biológicas como lo es el Ulex europaeus mejor conocido como Retamo espinoso. Y, es el embalse que permite el suministro de agua potable al sur de Bogotá. Seguidamente el recorrido fue hacia la vereda Arrayanes, en donde actualmente se hacen cultivos de fresa orgánica, y en donde se ve la importancia de no trabajar con agroquímicos. Para finalizar nuestro viaje, llegamos a la laguna los Tunjos y el inicio del Parque Nacional Natural Sumapaz, considerado el páramo más grande del mundo y una de las fuentes hídricas más importantes del país.