Granadilla, antiguo señorío de Granada, es una villa amurallada de origen feudal en el noroeste de la provincia de Cáceres, Extremadura, España, que ejerció durante siglos la capitalidad de un señorío que comprendía diecisiete municipios. Con el decreto de expropiación del pueblo para la construcción del pantano de Gabriel y Galán (1955) comienza el éxodo forzoso de sus habitantes, que dura hasta que emigran en 1964 los últimos vecinos. El pueblo se había convertido en zona inundable. El embalse sumerge sus tierras fértiles y los accesos que existían: Granadilla se transforma en una península deshabitada, un pueblo abandonado al que sólo se puede acceder por el norte. En 1965, el gobierno disuelve el municipio y reparte sus tierras entre los pueblos de Mohedas y Zarza de Granadilla.En 1980 el pueblo fue declarado Conjunto histórico-artístico, y ese mismo año da comienzos la restauración de la muralla y el castillo. En 1984 se incluye, junto a Umbralejo y Búbal, en el Programa interministerial de pueblos abandonados, que pretendía la rehabilitación y el aprovechamiento educativo de los citados pueblos. Dentro de un programa con parecidos objetivos continúa y hace posible que el pueblo, semana a semana, vuelva a estar habitado por jóvenes estudiantes y que la historia, el patrimonio, las costumbres de sus antiguos moradores nunca se pierdan en el olvido.